Proponen la creación de un organismo mixto para solucionar los problemas del centro histórico cruceño

La creación de un organismo mixto para solucionar los problemas del casco viejo cruceño, fue la principal idea surgida de las mesas de trabajo en el primer conversatorio Revolución Urbana SCZ, que tuvo como tema “Desenredando el centro histórico”. Dicho ente estaría compuesto por miembros de la sociedad civil e instituciones sin fines políticos. 

El coloquio, organizado por el Colegio de Arquitectos de Santa Cruz (CASCZ), cuenta con el respaldo del Colegio de Arquitectos de Bolivia (CAB), en su afán por impulsar las actividades académicas. Sobre el resultado arrojado, Rim Safar, presidenta del CAB, expresó al final: “Antes, cuando había el Comité de Obras Públicas, ¿quién definía qué se hacía en la ciudad? La empresa pública, la empresa privada, la sociedad civil y representantes de muchas otras instituciones. Un plan de desarrollo territorial no lo puede elaborar y aprobar la misma persona”. Esto refiriéndose al Gobierno Municipal de la capital cruceña.

Previo a las mesas técnicas, en las que participaron universitarios, profesionales, académicos, gestores culturales y vecinos, hubo un diálogo entre los panelistas Mariel Palma, María Luisa Vásquez, Virgilio Suárez y Jimmy Toledo. Palma se había referido al tema: “Necesitamos un ente que articule las necesidades de ese espacio; que sea mixto y con la participación de la parte privada”. 

Asimismo, se llegó a la conclusión que para revitalizar el corazón de Santa Cruz de la Sierra se debe tener un plan de acciones sostenibles que contemplen la movilidad urbana, el uso de suelo y la vivienda. Ante ello, es importante el ordenamiento del transporte público, el tema de la altura de las edificaciones y la reducción de impuestos a los vecinos. En la misma línea se pensó en volver las oficinas públicas al centro, resolviendo antes el problema del parqueo. 

Del mismo modo, se expresó la idea de fomentar una red colaborativa a las actividades que generan cierto movimiento en la zona, como las culturales y los negocios de industria naranja. En el mismo sentido, se debe procurar una economía asequible por ser un lugar democrático, receptor de ciudadanos de todos los puntos de la ciudad. 

Para la arquitecta María Luisa Vásquez, la función cultural del centro es de suma importancia al brindar actividades que dan vida a la zona. La profesional está convencida de que la función habitacional debe volver al casco antiguo y para ello se debe hacer algo entre todos. El arquitecto y sociólogo Jimmy Toledo consideró que los movimientos culturales y la economía naranja brindan la posibilidad de que aparezcan nuevos gestores que logren alianzas interinstitucionales y una nueva gobernanza.

Por otro lado, se señalaron los sitios históricos a revalorizar y para darlos conocer a las nuevas generaciones y turistas: el cementerio general, los claustros e iglesias antiguas, las casonas coloniales, los mercados, la plazuela Callejas, entre otros. 

La actividad concluyó con un debate entre todos los participantes. Carlos Alberto Morales, presidente del Colegio de Arquitectos de Santa Cruz, y Rim Safar, titular del colegiado nacional, expresaron al final su complacencia por el resultado de la actividad, creada para el diálogo, reflexión y elaboración de propuestas que ayuden a solucionar diversas problemáticas en las ciudades y de los ciudadanos.  

En este primer conversatorio estuvieron presentes los arquitectos Mario Aguilera, vicegobernador del departamento de Santa Cruz, y Andrea Daza, secretaria municipal de Planificación para el Desarrollo. La periodista Maggy Talavera, que ofició como moderadora, aportó también al diálogo desde su perspectiva como vecina.