La arquitecta Rim Safar siempre ha encarado retos en su vida. Y el que asumió a principios de este año es, sin duda, uno de los más importantes: ser presidenta por segunda vez del Colegio de Arquitectos de Bolivia. 

¿Qué representa para usted retornar al Comité Ejecutivo Nacional del Colegio de Arquitectos de Bolivia?

Es interesante volver, pero al mismo tiempo es un gran reto, ya que dejamos una vara muy alta. Por lo tanto es un doble esfuerzo poder superar lo que hicimos antes. La ventaja es que sabemos dónde atacar, sabemos qué hace falta. Lo lamentable es que no se haya avanzado en varios temas en los que habíamos avanzado en nuestra gestión anterior. Uno de los problemas de nuestras instituciones es que no se da continuidad al trabajo de otros.

¿Qué harán al respecto?

Nosotros estamos rescatando lo mejor de las anteriores directivas. Queremos que la institución se posicione sin importar quién esté a la cabeza. Queremos que se consolide más allá de quién lleva el timón del barco. Lo importante es cómo navega este barco y hacer que llegue a buen puerto. 

¿Y usted a dónde le gustaría que llegue ese barco llamado Colegio de Arquitectos de Bolivia?

Uno de nuestros principales objetivos es convertir al CAB como una de las mejores instituciones a escala internacional, a nivel Latinoamericano. Ya somos un organismo con relevancia nacional, pero ahora queremos trascender más allá de nuestras fronteras. 

¿Qué amenazas podrían impedir llegar al objetivo planteado?

La crisis económica que está sacudiendo a las empresas y profesionales. La situación de salud también nos preocupa, porque estamos perdiendo a muchos colegas, familiares y amigos. Estamos tratando de ayudar a través de diferentes actividades para impulsar la reactivación económica, motivando a los alcaldes para que ellos sean agentes de cambio en diferentes regiones y de esta manera todos avancemos. 

En un ambiente complicado también hay oportunidades ¿cuáles serían las que se presentan para el Colegio?

La necesidad de la reactivación económica es la gran oportunidad. Si bien la crisis global a nivel económico y de salud nos ha dejado un vacío muy grande, también nos enseña muchas lecciones. Es por eso que como Colegio de Arquitectos de Bolivia estamos abocados a impulsar la transformación tecnológica y de esta manera hacer que nuestra institución y profesionales estén listos para encarar los tiempos actuales. Es una de las muchas tareas que nos hemos propuesto y estamos dando pasos firmes para lograrlo.